La aparición de tumores productores de catecolaminas está influenciada por la actividad de ciertos genes. Estos tumores, conocidos como feocromocitomas y paragangliomas, están asociados con mutaciones en genes que regulan la función de las células cromafines, responsables de la producción de catecolaminas como la adrenalina y la noradrenalina.
Mutaciones en genes como RET, VHL, SDHx, MAX, y otros, han sido identificadas en pacientes con feocromocitomas y paragangliomas. Estos genes desempeñan un papel en la regulación del crecimiento celular, la diferenciación y la supresión tumoral. Las mutaciones pueden llevar a una proliferación celular descontrolada y a la formación de tumores en las glándulas suprarrenales y otros tejidos relacionados.
La comprensión de la genética subyacente a estos tumores no solo es crucial para el diagnóstico, sino también para el desarrollo de estrategias terapéuticas dirigidas que puedan abordar específicamente las vías moleculares involucradas en su formación y progresión.
Genes intervienen en la aparición de tumores productores de catecolaminas
Los feocromocitomas y los paragangliomas son tumores productores de catecolaminas provenientes del sistema nervioso simpático o parasimpático. Pueden surgir en forma esporádica o heredarse como partes del síndrome de neoplasia endocrina múltiple de tipo 2, enfermedad de van Hippel-Lindau u otros síndromes que se asocian con feocromocitomas.
El diagnóstico de feocromocitoma identifica una causa potencialmente reversible de hipertensión, y su extirpación evita crisis hipertensivas que pueden ser letales.
El cuadro inicial es variable y va de un incidentaloma suprarrenal hasta un paciente con crisis hipertensivas asociadas con complicaciones cerebro vasculares o cardiacas.
La media de edad en el momento del diagnóstico es a los 40 años, si bien los tumores pueden surgir desde el inicio de la niñez hasta etapas avanzadas de la vida.
La «regla de los dieces» referida a los feocromocitomas indica que, en promedio, 10% son bilaterales, 10% son extrasuprarrenales y 10% son cancerosos.
Los feocromocitomas y los paragangliomas son neoplasias muy vascularizadas que provienen de células derivadas de tejido paraganglionar simpático ( como la médula suprarrenal o el tronco simpático) o parasimpático ( como el cuerpo carotídeo, el glomus timpánico, el glomus yugular o el vagal).
El término feocromocitoma refleja el color oscuro de su parénquima ocasionado por la oxidación cromafínica de catecolaminas. El término feocromocitoma se usa para los tumores suprarrenales y el de paraganglioma se usa para los tumores localizados en todas las otras regiones.
Se desconoce la causa de los feocromocitomas y paragangliomas esporádicos. Alrededor del 25 a 33% de los enfermos tiene un cuadro hereditario que incluye mutaciones en la línea germinativa de los genes clásicamente reconocidos:
- RET (reordenado durante la transfección),
- VHL
- NFl (neurofibromatosis tipo 1)
- SDHB
- SDHC y SDHD (subunidades de SDH)
- SDHA
- SDHAF2
- TMEM127 (proteína transmembranal 127)
- MAX (factor X asociado a myc)
- FH (fumarato hidratasa)
- PDHl, PDH2 (piruvato deshidrogenasas)
- HIFlalpha (factor inducible por hipoxia)
- MDH2 (malato deshidrogenasa)
- KIFlB (miembro de la familia de las cinesinas).
En la actualidad, los genes de susceptibilidad a feocromocitoma y paraganglioma se atribuyen a dos grupos. Las mutaciones del grupo 1 se asocian con pseudohipoxia y señalización aberrante del factor de crecimiento vascular endotelial (VHL, PHD, FH o SDHx [subunidades de SDH]), mientras que las mutaciones del grupo 2 se asocian con activación anormal de vías de señalización de cinasas (RET, NFl, TMEM127, MAX o KIFlBB).

Originally posted on 16 de noviembre de 2022 @ 9:10 AM