Lesiones traqueales relacionadas con la intubación

Lesiones traqueales relacionadas con la intubación
Lesiones traqueales relacionadas con la intubación

Las lesiones traqueales puede ser consecuencia de diversas causas que incluyen:

  • inhalación de humo o vapores tóxicos
  • aspiración de líquidos o de objetos sólidos
  • intubación endotraqueal
  • traumatismo cerrado y penetrante
  • lesiones yatrógenas durante procedimientos quirúrgicos.

El diagnóstico precoz es crítico para evitar complicaciones subsiguientes entre las que se encuentran las infecciones respiratorias y estenosis traqueal.

 

La inflación excesiva de los globos endotraqueales es la causa más común de lesiones secundarias a intubación endotraqueal.

Las presiones elevadas en los manguitos pueden causar isquemia de la pared contigua de las vías respiratorias en periodos de hasta 4 horas. La inflación excesiva y por periodos prolongados puede ocasionar cicatrización y estenosis; pueden ocurrir lesiones de espesor total con formación de fístulas entre el tronco arterial braquiocefálico en dirección anterior y el esófago, en dirección posterior. La prevención de estas complicaciones requiere inflado cuidadoso del manguito para mantener las presiones tan bajas como sea posible; en circunstancias de apoyo ventilatorio prolongado y presiones ele vadas en las vías respiratorias, es recomendable vigilar la presión del globo (a fin de mantener presiones < 20 mmHg).

Los factores de riesgo relacionados con intubación incluyen:

  • intubación prolongada
  • traqueostomía alta a través del primer anillo traqueal o de la membrana cricotiroidea
  • incisión transversal más que vertical sobre la tráquea
  • sonda de traqueostomía de tamaño más grande del recomendado
  • traqueostomía o intubación previas
  • intubación traumática.

 

La estenosis también es más común en pacientes de vedad avanzada, en mujeres, después de radiación o después de tratamiento excesivo con corticoesteroides, así como en el caso de enfermedades concomitantes como enfermedad grave por reflujo, trastornos autoinmunitarios o apnea obstructiva del sueño y en el caso de insuficiencia respiratoria grave. Sin embargo, incluso cuando se coloca la traqueostomía de manera apropiada puede producirse estenosis traqueal por cicatrización y lesión local. A menudo se observan ulceración leve y estenosis después del retiro de la sonda de traqueostomía. El uso de sonda más pequeña disponible para traqueostomía, la reducción rápida del tamaño de la sonda y una incisión traqueal vertical reducen el riesgo de estenosis después de traqueostomía.

El estridor y la disnea de esfuerzo son los síntomas primarios de estenosis traqueal. En el caso de lesiones después de intubación, se destruye una porción significativa de apoyo estructural cartilaginoso a la vía aérea por necrosis isquémica; durante la cicatrización se desarrolla un tejido fibroso similar a una membrana y ocurre estrechamiento de las vías respiratorias.

La estenosis causada por traqueostomía más a menudo se debe a la formación excesiva de tejido de granulación alrededor del sitio de estoma traqueal. El tiempo de inicio de los síntomas después de la extubación o del retiro de la sonda de traqueostomía suele variar de dos a 12 semanas, pero pueden aparecer de inmediato o incluso hasta uno o dos años después.

La intensidad de los síntomas se relaciona con el grado de estenosis .

 

Tratamiento

Con la valoración broncoscópica puede documentarse la longitud de la estenosis, su ubicación, la distancia entre las cuerdas vocales y la estenosis proximal y la distancia desde el borde distal a la carina.

En pacientes con estenosis grave y compromiso respiratorio, puede utilizarse la broncoscopia rígida para dilatar la estenosis; esto proporciona alivio inmediato de la obstrucción de las vías respiratorias y facilita la valoración cuidadosa de la estenosis. Rara vez, o acaso nunca, es necesaria la traqueostomía.

La mayor parte de lesiones por intubación se ubican en el tercio superior de la tráquea y se puede tener acceso a las mismas para su resección a través de una incisión circunferencial. La resección por lo general involucra 2 a 4 cm de tráquea para los casos de este
nosis benigna. Es fundamental extirpar por completo todo el tejido inflamable cicatrizado. Puede realizarse una anas tomosis primaria sin tensión, incluso si es necesaria la resección hasta de la mitad de la tráquea.

En pacientes en quienes no es posible la resección traqueal, como aquellos con enfermedades asociadas significativas o con estenosis excesivamente larga, puede obtenerse paliación mediante la colocación de prótesis endotraqueales, por lo general con tubos en T de silicona. Las endoprótesis de malla de alambre no se utilizan, dada su pro pensión a causar erosión a través de la pared de las vías respiratorias.

 

 

 

Homo medicus

 


 

Fuente:

  • Brunicardi C.F. Schwartz. Principios de cirugía. 11 ed. McGraw Hill. 2020

 
Anatomía del hígado

Anatomía del hígado

Síguenos en X: @el_homomedicus  y @enarm_intensivo    

🟥     🟪     🟨     🟧     🟩     🟦

APRENDER CIRUGÍA

¿De cuánta utilidad te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Ya que has encontrado útil este contenido...

¡Sígueme en los medios sociales!

Avatar del usuario

Homo medicus

Conocimiento médico en evolución...

También te podría gustar...