Origen de la ética filosófica
El origen de la ética filosófica se encuentra en la necesidad de superar las limitaciones de la moral de la sociedad y la moral del individuo. Aunque estas formas de moralidad desempeñan un papel importante en la vida cotidiana y en la organización social, a veces pueden resultar insuficientes o insatisfactorias.
La moral de la sociedad se refiere a las normas y valores compartidos por un grupo o comunidad determinada. Estas normas pueden variar significativamente entre diferentes sociedades, culturas y épocas históricas. Lo que se considera moralmente aceptable en una sociedad puede ser considerado inaceptable en otra. Además, la moral de la sociedad a menudo cambia con el tiempo y puede tener dificultades para adaptarse a los cambios sociales y a las nuevas situaciones.
La moral del individuo, por otro lado, se basa en las creencias y valores personales de cada individuo. Cada persona tiene su propia conciencia moral y toma decisiones éticas en función de sus propios principios y convicciones. Sin embargo, incluso dentro de un mismo grupo social, las opiniones y valores individuales pueden variar ampliamente. Esto puede generar conflictos difíciles de resolver cuando chocan diferentes sistemas de valores y perspectivas éticas.
Además, tanto la moral de la sociedad como la moral del individuo pueden carecer de fundamentos universales y argumentos racionales sólidos. Las normas y valores morales a menudo se basan en tradiciones, costumbres, autoridad o intuiciones personales, lo que puede resultar insatisfactorio desde el punto de vista de la fundamentación ética. Sin una base sólida y universalmente aplicable, es difícil justificar las normas morales y resolver los dilemas éticos de manera coherente y racional.
Ante estas limitaciones, surge la ética como una reflexión racional y sistemática sobre el fenómeno moral. La ética busca elaborar conceptos claros, ofrecer modelos explicativos, sistematizar teorías éticas, justificar las normas morales, y desarrollar métodos y procedimientos para abordar los problemas éticos. A través de la reflexión filosófica, se busca encontrar fundamentos racionales y universales para la ética, permitiendo un enfoque más consistente y objetivo.
En la cultura occidental, esta reflexión ética comenzó con los sofistas griegos en el siglo V a.C. Estos filósofos se dedicaban a enseñar el arte de la persuasión y el razonamiento moral. Sin embargo, fue a través del trabajo de filósofos morales posteriores, como Sócrates, Platón, Aristóteles y muchos otros, que la ética se desarrolló como una disciplina filosófica sistemática.
El objetivo de la ética es proporcionar un marco teórico y práctico para comprender, analizar y guiar la conducta humana desde una perspectiva ética. Busca establecer principios y valores morales fundamentales, así como ofrecer modelos y teorías éticas que puedan aplicarse a situaciones concretas. La ética se basa en la razón y la argumentación lógica para fundamentar sus propuestas y justificar sus conclusiones.
Síguenos en X: @el_homomedicus y @enarm_intensivo APRENDER CIRUGÍA