Ventajas de la medicina basada en evidencias para los pacientes

por Homo medicus · 18 de enero de 2024

La medicina basada en evidencias (MBE) ofrece varias ventajas para los pacientes en términos de la atención médica que reciben:

Disminuye la variabilidad de opiniones: La MBE busca establecer una práctica clínica basada en pruebas científicas sólidas. Al seguir este enfoque, se busca reducir la variabilidad en las opiniones médicas y garantizar que las decisiones se tomen en base a la mejor evidencia disponible. Esto disminuye la incertidumbre y aumenta la consistencia en la atención médica, lo que es beneficioso para los pacientes.
Mejora la comunicación médico-paciente: La MBE promueve una comunicación más efectiva entre el médico y el paciente. Al basar las decisiones médicas en evidencia científica sólida, se puede explicar de manera más clara y comprensible al paciente las opciones de tratamiento, los riesgos y beneficios, y las posibles alternativas. Esto permite una comunicación más informada y una participación activa del paciente en la toma de decisiones.
Participación del paciente en la toma de decisiones: La MBE fomenta la participación activa del paciente en la toma de decisiones sobre su atención médica. Al proporcionar información basada en pruebas, el médico puede discutir con el paciente las opciones disponibles, los resultados esperados y las preferencias personales. Esto empodera al paciente y le permite tomar decisiones informadas y acorde a sus valores y necesidades.
Atención médica integral, actualizada y documentada: La MBE busca brindar una atención médica integral y basada en pruebas. Al utilizar la mejor evidencia disponible, se busca asegurar que el paciente reciba un tratamiento efectivo y seguro, evitando intervenciones innecesarias o no respaldadas por pruebas sólidas. Además, la MBE promueve la documentación adecuada de la atención médica, lo que facilita el seguimiento y la continuidad de la atención.
Democratización real del conocimiento: La MBE busca democratizar el acceso al conocimiento médico basado en evidencias. Al utilizar la mejor evidencia disponible, independientemente de las opiniones individuales o de las barreras de acceso a la información, se promueve una atención médica basada en pruebas científicas sólidas. Esto beneficia a todos los pacientes, independientemente de su ubicación geográfica, nivel socioeconómico o recursos disponibles.