¿Qué es la atención paliativa?
La atención paliativa es un enfoque de la atención médica que se centra en mejorar la calidad de vida de las personas que padecen enfermedades graves. Esta atención se ofrece a pacientes que tienen condiciones que implican un alto riesgo de mortalidad, que afectan negativamente su calidad de vida y su capacidad para realizar actividades diarias, o que generan síntomas difíciles de manejar y un gran estrés para los cuidadores.
En la práctica, la atención paliativa aborda tanto los aspectos físicos como los psicológicos del sufrimiento del paciente. Se centra en controlar los síntomas, como el dolor, la fatiga, la falta de aire y la depresión, para que los pacientes puedan vivir con la mayor comodidad y dignidad posible. Además, la atención paliativa se asegura de que la atención médica se alinee con las preferencias y metas de los pacientes a través de una comunicación abierta y honesta. Esto implica discutir los objetivos del tratamiento y ayudar a los pacientes a tomar decisiones informadas sobre su atención médica.
La atención paliativa también brinda un valioso apoyo emocional y espiritual tanto a los pacientes como a sus seres queridos. Ayuda a abordar los temores, la ansiedad y la angustia que pueden surgir al enfrentar una enfermedad grave, y proporciona un espacio seguro para la expresión de emociones y preocupaciones.
Los estudios han demostrado que la atención paliativa, cuando se proporciona junto con el tratamiento que prolonga la vida a lo largo del curso de una enfermedad grave, puede tener beneficios significativos. Puede reducir los síntomas, mejorar la calidad de vida y, en algunos casos, incluso prolongar la vida de los pacientes.
A medida que la enfermedad progresa y el paciente se acerca al final de la vida, la atención paliativa puede convertirse en el enfoque principal de atención. En esta etapa, el objetivo principal es maximizar la comodidad del paciente y brindar apoyo tanto físico como emocional a él y a su familia durante este momento difícil.
Es crucial reconocer que la atención paliativa no solo se aplica en las etapas finales de la vida. Aunque puede convertirse en el enfoque principal de atención cerca del final de la vida, también se ofrece a lo largo de la trayectoria de la enfermedad grave, adaptándose a las necesidades cambiantes del paciente y su familia. Además, todos los profesionales de la salud deben estar capacitados en las habilidades básicas de atención paliativa, lo que implica la capacidad de identificar y abordar los síntomas, comunicarse efectivamente con los pacientes y sus familias sobre el pronóstico y las preferencias de atención, y brindar apoyo para abordar las fuentes de angustia emocional.
Anatomía del hígado
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