Las venas porta accesorias son pequeñas venas que llegan al hígado sin seguir la ruta tradicional de la vena porta hepática. Estas venas proporcionan rutas alternativas para el flujo sanguíneo hacia el hígado y pueden tener importancia clínica en ciertos contextos.
- Venas Gastrohepáticas:
- Ubicadas en el omento menor, algunas de estas venas siguen el curso de la arteria hepática izquierda, que se origina de la arteria gástrica izquierda cuando está presente.
- Proporcionan una vía adicional para el flujo sanguíneo desde el estómago hacia el hígado.
- Venas del Ligamento Falciforme:
- Estas venas accesorias se encuentran en el ligamento falciforme, que es una estructura que conecta el hígado con la pared abdominal anterior.
- Constituyen otra ruta para el flujo sanguíneo hacia el hígado.
- Venas Císticas:
- Originadas en la pared vesicular, estas venas se dirigen directamente al hígado, proporcionando una conexión entre la vesícula biliar y el órgano hepático.
- Venas Frénicas:
- Provenientes de la porción vertical posterior del diafragma, estas venas siguen la vía de los ligamentos triangulares y el ligamento coronario para llegar al hígado.
- Ofrecen una conexión entre la región diafragmática y el hígado, contribuyendo a la circulación hepática.
- Venas Parahiliares (Couinaud):
- Estas venas conectan el arco venoso pancreatoduodenal superior y posterior en el porta hepático.
- Tienen la capacidad de servir como vías de derivación en situaciones donde la vena porta hepática puede estar obstruida o afectada.

La presencia de venas porta accesorias añade complejidad a la vascularización hepática, pero también puede tener implicaciones clínicas significativas. En situaciones donde la vena porta hepática está comprometida, estas venas accesorias pueden desempeñar un papel crucial al proporcionar vías alternativas para el flujo sanguíneo hacia el hígado, evitando así posibles complicaciones asociadas con la obliteración de la vena porta hepática.

Originally posted on 5 de diciembre de 2023 @ 12:42 AM