Tratamiento de la diverticulitis no complicada

por Homo medicus · 18 de febrero de 2024

La diverticulitis sin complicaciones es una afección médica caracterizada por la inflamación localizada de un divertículo en el colon, y suele presentarse con síntomas como dolor e hipersensibilidad en el cuadrante inferior izquierdo del abdomen.

Manifestaciones clínicas

Los síntomas de la diverticulitis sin complicaciones se originan en el área del colon donde se encuentra el divertículo inflamado. Por lo general, esto ocurre en el cuadrante inferior izquierdo del abdomen, ya que es una de las ubicaciones más comunes para la formación de divertículos en el colon sigmoide. La inflamación del divertículo provoca dolor abdominal que a menudo es constante y se manifiesta como una sensación punzante o de presión. La hipersensibilidad en la misma área es resultado de la irritación de los tejidos circundantes debido a la inflamación.

Exámenes complimentarios

Para confirmar el diagnóstico y evaluar la gravedad de la diverticulitis sin complicaciones, se realizan estudios de imagen, como una tomografía computarizada (CT). Los datos que se encuentran en la CT pueden incluir varios hallazgos:

- Torcimiento del tejido blando pericólico: La inflamación puede causar cambios en la posición y la estructura de los tejidos circundantes, lo que a veces se traduce en un aspecto retorcido en la CT.
- Engrosamiento de la pared del colon: La inflamación del divertículo puede extenderse a la pared del colon, lo que resulta en un engrosamiento de esta pared en las imágenes de la CT.
- Flemón: El flemón es un término que se utiliza para describir la inflamación localizada en el tejido circundante al divertículo inflamado. Este hallazgo en la CT es una característica común de la diverticulitis sin complicaciones.

Tratamiento

Muchos pacientes con diverticulitis sin complicaciones pueden ser tratados de manera ambulatoria sin necesidad de hospitalización. El tratamiento generalmente implica:

Antibióticos orales de amplio espectro: Se prescriben antibióticos orales para combatir la infección en el divertículo y reducir la inflamación. Estos antibióticos suelen administrarse durante un período de siete a 10 días.
Dieta con residuo bajo: Se recomienda una dieta con bajo contenido en residuo, que implica evitar alimentos que puedan aumentar la irritación en el colon, como semillas y nueces. Esta dieta ayuda a reducir la carga en el colon mientras se recupera.

El tratamiento y la gestión de la diverticulitis pueden variar según la gravedad de la condición. Aquí se proporciona una explicación amplia sobre cómo se abordan los casos más severos, que representan aproximadamente el 10 al 20% de los pacientes con síntomas intensos:

Tratamiento hospitalario: Cuando un paciente presenta síntomas más graves de diverticulitis, como dolor intenso, hipersensibilidad abdominal, fiebre y leucocitosis (un aumento en el número de glóbulos blancos en la sangre), es necesario un manejo más intensivo. Estos pacientes suelen requerir hospitalización para un tratamiento adecuado.
Antibióticos parenterales: En lugar de utilizar antibióticos orales, se administran antibióticos por vía intravenosa (parenteral) en el entorno hospitalario. Esto permite una entrega más rápida y efectiva de los medicamentos para combatir la infección y reducir la inflamación.
Reposo intestinal: Durante la hospitalización, se recomienda reposo intestinal, lo que significa evitar la ingesta de alimentos sólidos para reducir la carga en el colon inflamado. En lugar de alimentos sólidos, se pueden administrar líquidos intravenosos para mantener la hidratación del paciente.
Mejora en 48 a 72 horas: En la mayoría de los casos, los pacientes con diverticulitis que reciben tratamiento hospitalario con antibióticos parenterales y reposo intestinal experimentan mejoras significativas en su condición en un período de 48 a 72 horas. Esto indica una respuesta positiva al tratamiento y la resolución de la inflamación.
Abscesos pericólicos: En algunos casos, la diverticulitis grave puede llevar a la formación de abscesos pericólicos, que son acumulaciones de pus en el área afectada. La tomografía computarizada (CT) es una herramienta extremadamente útil en estos casos, ya que puede identificar la presencia de un absceso y su ubicación. Muchos abscesos pericólicos pueden ser drenados de manera percutánea mediante la guía de imágenes radiológicas, lo que evita la necesidad de una cirugía invasiva.
Indicaciones para cirugía: En situaciones en las que el paciente no mejora con el tratamiento médico, se experimenta un deterioro del estado clínico o se desarrolla peritonitis (infección e inflamación generalizada en la cavidad abdominal), se puede considerar una cirugía de emergencia. La cirugía abdominal abierta, conocida como laparotomía, puede ser necesaria para tratar complicaciones graves y potencialmente mortales.

✳️ La diverticulitis sin complicaciones se caracteriza por la inflamación de un divertículo en el colon, que provoca dolor y hipersensibilidad en el cuadrante inferior izquierdo del abdomen. Los hallazgos en la tomografía computarizada incluyen cambios en los tejidos circundantes, como el torcimiento del tejido blando pericólico, el engrosamiento de la pared del colon y la presencia de flemón. El tratamiento generalmente implica antibióticos orales de amplio espectro y una dieta con residuo bajo, y la mayoría de los pacientes pueden recibir tratamiento de manera ambulatoria sin necesidad de hospitalización. El objetivo es aliviar la inflamación, tratar la infección y permitir que el colon se recupere adecuadamente.

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