La saliva es un líquido claro y acuoso que se produce en las glándulas salivales y se secreta en la cavidad oral a través de pequeños conductos. Es esencial para la salud bucal y tiene múltiples funciones en el cuerpo humano.
La saliva está compuesta principalmente por agua, pero también contiene una variedad de compuestos y sustancias químicas como enzimas, electrolitos, proteínas, anticuerpos, mucinas y lípidos. Estos compuestos tienen funciones específicas que son importantes para el mantenimiento de la salud bucal y la digestión de los alimentos.
Composición
La saliva es un líquido complejo que contiene una variedad de compuestos y sustancias químicas, incluyendo agua, iones, proteínas, enzimas, mucinas y lípidos. A continuación se describen algunos de los principales componentes químicos de la saliva:
- Agua: La saliva es principalmente agua (alrededor del 99%), que es importante para mantener la hidratación de la boca y la garganta.
- Iones: La saliva contiene varios iones como sodio, potasio, cloruro, bicarbonato, calcio y fosfato. Estos iones son importantes para mantener el equilibrio ácido-base de la boca y para la remineralización del esmalte dental.
- Proteínas: La saliva contiene muchas proteínas, como la amilasa salival, que ayuda a descomponer los carbohidratos en la boca. También contiene lisozima, que ayuda a destruir las bacterias, y inmunoglobulinas, que son importantes para la defensa contra las infecciones.
- Enzimas: Además de la amilasa salival, la saliva también contiene otras enzimas como la lipasa, que ayuda a descomponer los lípidos, y la lisozima, que ayuda a destruir las bacterias.
- Mucinas: Las mucinas son proteínas que actúan como lubricantes y ayudan a mantener la humedad en la boca y la garganta.
- Lípidos: La saliva también contiene lípidos, como fosfolípidos y colesterol, que son importantes para la salud de las membranas celulares y la digestión de los lípidos.
Funciones
La saliva tiene varias funciones importantes, entre las que se incluyen:
- Lubricación de la boca y la garganta: la saliva actúa como un lubricante natural que ayuda a humedecer y suavizar la boca y la garganta, facilitando la deglución y previniendo la irritación y sequedad de la boca.
- Digestión de los alimentos: la saliva contiene enzimas como la amilasa salival, que ayuda a descomponer los carbohidratos en la boca. La saliva también ayuda en la digestión de las proteínas y los lípidos.
- Protección de los dientes: la saliva contiene calcio, fosfato y otros iones que ayudan a remineralizar y fortalecer el esmalte dental. También contiene anticuerpos y otras proteínas que ayudan a combatir las bacterias y protegen los dientes de la caries dental.
- Protección de la boca y la garganta: la saliva contiene inmunoglobulinas y otras proteínas que ayudan a proteger la boca y la garganta de las infecciones bacterianas y virales.
- Ayuda en el habla: la saliva ayuda a humedecer y lubricar los labios y la lengua, lo que facilita la articulación de las palabras y el habla.
La producción de saliva está controlada por el sistema nervioso autónomo, que regula la cantidad de saliva producida y secretada en la boca. La producción de saliva puede verse afectada por varios factores, como el estrés, la ansiedad, ciertos medicamentos, la deshidratación y la edad.



Originally posted on 2 de abril de 2023 @ 9:58 AM