Recomendación de actividad física de 6 a 17 años

por Homo medicus · 31 de enero de 2024

Proporcionar a los jóvenes oportunidades y estímulos para participar en actividades físicas apropiadas para su edad, agradables y variadas es esencial para promover un estilo de vida activo y saludable. La recomendación de al menos 1 hora diaria de actividad física moderada o vigorosa, que incluye ejercicios aeróbicos, reforzamiento muscular y reforzamiento de huesos, para niños y adolescentes de 6 a 17 años, se basa en una serie de razones importantes:

Desarrollo Físico Integral: La variedad de actividades físicas contribuye al desarrollo holístico de los jóvenes. Los ejercicios aeróbicos mejoran la salud cardiovascular y la resistencia, mientras que el reforzamiento muscular y de huesos fortalece los músculos y los huesos en crecimiento.
Prevención de Enfermedades: La actividad física regular ayuda a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y la osteoporosis en la vida adulta. Fomentar estas prácticas desde una edad temprana establece patrones de salud a largo plazo.
Control de Peso: Las actividades físicas ayudan a mantener un peso saludable, lo que es esencial para prevenir la obesidad y los problemas de salud asociados.
Desarrollo Muscular y Óseo: Las actividades de reforzamiento muscular y de huesos son fundamentales para el desarrollo adecuado de la fuerza y la densidad ósea, lo que contribuye a una estructura corporal más saludable y reduce el riesgo de lesiones.
Hábitos Saludables: Exponer a los jóvenes a una variedad de actividades físicas crea la posibilidad de descubrir actividades que disfruten y que quieran continuar en su vida adulta, estableciendo hábitos saludables a largo plazo.
Salud Mental y Bienestar: La actividad física regular se ha relacionado con la mejora del estado de ánimo, la reducción del estrés y la ansiedad, y la promoción del bienestar emocional en jóvenes.
Desarrollo Social: Participar en actividades físicas con amigos o en grupos fomenta las interacciones sociales, la cooperación y el trabajo en equipo, lo que contribuye al desarrollo social y emocional de los jóvenes.
Desarrollo de Habilidades Motoras: La variedad de actividades físicas ayuda a mejorar las habilidades motoras fundamentales, como la coordinación, el equilibrio y la destreza, lo que es esencial para un desarrollo físico saludable.
Establecimiento de Rutinas: Proporcionar oportunidades regulares para la actividad física ayuda a establecer rutinas y hábitos positivos en la vida diaria de los jóvenes.
Promoción de la Diversión: La diversidad y la variedad en las actividades físicas aumentan la posibilidad de que los jóvenes encuentren placer y diversión en el movimiento, lo que puede mejorar su disposición a participar en actividades activas.