El envenenamiento por cianuro accidental o intencional, es una amenaza potencialmente mortal para las personas. El cianuro se encuentra fácilmente disponible y es altamente letal. Administrado por vía oral en particular el cianuro es más peligroso en comparación con otras vías de exposición. El cianuro de potasio (KCN) y el cianuro de sodio (NaCN) son las sales de cianuro ingeridas con mayor frecuencia
La mayor parte de los casos de intoxicaciones son por cianuro ingerido, en comparación con el inhalado. Los efectos clínicos son diferentes a dependiendo la vía. Las exposiciones orales al cianuro pueden resultar en una mayor absorción en comparación con la vía inhalatoria. Con exposiciones orales, los pacientes pueden tener una absorción continua de la toxina una vez que la ingieren. Por el contrario, las exposiciones por inhalación pueden limitarse debido a que dependen de la respiración del paciente y disminuyen como consecuencia del desarrollo de apnea por la misma toxicidad por cianuro. Las personas que ingieren cianuro pueden consumir grandes cantidades antes de desarrollar síntomas.
Una vez absorbido en el torrente sanguíneo, puede atravesar fácilmente la membrana celular e inhibir múltiples enzimas como la succínica deshidrogenasa, superóxido dismutasa y citocromo oxidasa que conduce al bloqueo del metabolismo de las mitocondrias y la inhibición de la respiración aeróbica. El desarrollo del metabolismo anaeróbico conduce a acidemia con hiperlactatemia característica de la intoxicación por cianuro.
Síntomas y signos de ingestión de cianuro
Los signos y síntomas del cianuro oral son similares a los del cianuro inhalado; sin embargo, el momento y la gravedad difieren. La exposición al cianuro a través de la vía de inhalación produce síntomas a los pocos segundos de la exposición, mientras que los síntomas posteriores a la ingestión ocurren en minutos u horas.
Pueden ocurrir relativamente pocos o ningún síntoma después del consumo de pequeñas cantidades de cianuro. Las dosis bajas con frecuencia causan dolor de cabeza, mareos, confusión leve, calambres abdominales, náuseas y vómitos.
Las exposiciones a dosis grandes conducen a disnea, depresión respiratoria, apnea, hipotensión, arritmias, coma y convulsiones. Estos efectos de grandes dosis pueden provocar lesiones irreversibles y la muerte a los pocos minutos a partir de la aparición de los síntomas.
Datos de laboratorio
Los niveles elevados de lactato en sangre y de oxígeno venoso son frecuentes en la intoxicación por cianuro. Existe hiperlactatemia, una brecha aniónica elevada y una disminución de los niveles de oxígeno arterial aunque estos valores anormales no son específicos de la intoxicación por cianuro.
El cianuro se une a la hemoglobina en los glóbulos rojos y existe una correlación directa entre los efectos tóxicos y la concentración de cianuro en sangre. La detección en el plasma y el suero es mínima. Debido a la filtración por los riñones, los niveles de cianuro en la orina son mucho más bajos que los niveles que se encuentran en la sangre.
