El sueño disminuye con el envejecimiento
A medida que avanzamos en edad, es común notar que nuestros patrones de sueño y la calidad de nuestro descanso pueden experimentar cambios, incluso cuando no hay trastornos del sueño evidentes. Estos cambios son una parte natural del proceso de envejecimiento y están influenciados por diversos factores que afectan la forma en que dormimos. Exploraremos las razones detrás de la tendencia a la disminución de los aspectos del sueño en personas mayores, a pesar de la ausencia de problemas de sueño diagnosicables.
Uno de los aspectos que puede cambiar es la estructura misma de nuestro sueño. A medida que envejecemos, es posible que pasemos menos tiempo en las etapas más profundas y reparadoras del sueño, como las fases 3 y 4, y el sueño REM, que es cuando soñamos intensamente. Esto puede llevar a una sensación de que el sueño no es tan restaurador como solía serlo.
Además, los cambios hormonales también desempeñan un papel importante en la calidad y la cantidad de sueño que experimentamos. La hormona melatonina, que regula nuestro ciclo sueño-vigilia, puede disminuir con la edad, lo que podría dificultar conciliar el sueño. Por otro lado, la hormona cortisol, a menudo asociada con el estrés, también puede fluctuar y afectar nuestros patrones de sueño.
Nuestro reloj biológico interno, conocido como ritmicidad circadiana, también puede cambiar a medida que envejecemos. Esto puede llevar a una preferencia por irse a la cama y levantarse más temprano, lo que podría impactar la duración y la calidad del sueño.
Además, las afecciones médicas crónicas que a menudo surgen con la edad pueden interferir con el sueño. La apnea del sueño, el reflujo gastroesofágico y otros problemas de salud pueden perturbar nuestros patrones de sueño. Asimismo, ciertos medicamentos comúnmente recetados para las personas mayores pueden tener efectos sobre el sueño.
Nuestros hábitos y estilo de vida también influyen en cómo dormimos a medida que envejecemos. La falta de actividad física regular y la exposición insuficiente a la luz natural durante el día pueden afectar nuestro ritmo circadiano y la calidad del sueño nocturno.
Anatomía del hígado
Síguenos en X: @el_homomedicus y @enarm_intensivo
APRENDER CIRUGÍA
