Los latidos prematuros ventriculares, conocidos como PVCs por sus siglas en inglés, son contracciones cardíacas anómalas que se originan en los ventrículos del corazón. Estas contracciones se producen antes de que el corazón complete su ciclo normal de bombeo, lo que resulta en un latido adicional que puede ser percibido como un «salto» o palpitación. En la mayoría de los casos, los PVCs se generan a partir de la región del tracto de salida o de las áreas del sistema de conducción His-Purkinje, que son responsables de la propagación del impulso eléctrico a través de los ventrículos.
Desde un punto de vista fisiológico, los PVCs se consideran una manifestación de actividad eléctrica ectópica, donde las células musculares cardíacas en los ventrículos se activan de manera prematura. Esto puede ocurrir debido a diversas razones, como el estrés, la cafeína, el consumo de alcohol, o la presencia de enfermedades que afectan la estructura o la función del corazón. A menudo, los PVCs se presentan de forma aislada y no están asociados a ninguna enfermedad cardiovascular significativa, lo que lleva a que en muchos pacientes se considere un hallazgo benigno.
A pesar de su naturaleza generalmente inofensiva, es importante reconocer que en ciertos contextos clínicos, los PVCs pueden representar un riesgo mayor. En particular, en pacientes con enfermedades cardíacas subyacentes, la presencia de PVCs puede ser un indicador de un corazón que es más susceptible a desarrollar arritmias más peligrosas, como la taquicardia ventricular o la fibrilación ventricular. Estas arritmias pueden comprometer la función cardíaca y resultar en una disminución del flujo sanguíneo, llevando a situaciones potencialmente mortales.
La relación entre los PVCs y estas arritmias severas puede deberse a varios mecanismos. Por un lado, la excitación ectópica provocada por un PVC puede crear un entorno propicio para la reentrada, un fenómeno donde el impulso eléctrico sigue un camino anómalo, causando una actividad eléctrica desorganizada. Por otro lado, los PVCs pueden desencadenar episodios de taquicardia ventricular en pacientes cuyo miocardio ya se encuentra comprometido, debido a una cicatriz o a un remodelado cardíaco.
Manifestaciones clínicas
Los pacientes que presentan latidos prematuros ventriculares pueden ser asintomáticos o experimentar síntomas como palpitaciones, mareos o dolor torácico difuso. Algunos individuos son capaces de sentir el latido irregular, aunque muchas veces los síntomas que reportan son secundarios a la respuesta hemodinámica del corazón tras un PVC. En particular, la contracción ventricular posterior a un PVC puede estar aumentada, fenómeno conocido como «aumento de la contractilidad post-PVC», o bien puede estar relacionada con una pausa compensatoria que sigue al latido prematuro. Esta pausa, que se produce porque el corazón necesita recuperar su ritmo normal después del PVC, puede generar una sensación de irregularidad en el latido.
Durante el ejercicio, se observa que el aumento de la frecuencia del ritmo sinusal generalmente suprime los latidos prematuros en corazones considerados normales. Este fenómeno puede atribuirse a un mayor gasto cardíaco y a una mayor eficiencia en la conducción eléctrica del corazón, lo que contrarresta la aparición de PVCs.
Desde un punto de vista electrocardiográfico, los PVCs se caracterizan por la presencia de complejos QRS anchos que difieren en morfología de los latidos normales del paciente. Estos complejos anómalos se presentan sin la precedencia de una onda P, aunque en algunos casos puede ocurrir una conducción retrógrada ventriculoauricular, lo que podría permitir que una onda P aparezca después del PVC.
Dentro de los patrones de presentación de los PVCs, se destacan dos formas conocidas como bigeminia y trigeminia. La bigeminia se refiere a un patrón donde cada segundo latido es un PVC, mientras que la trigeminia implica que cada tercer latido es prematuro. Estos patrones pueden afectar la percepción de los síntomas en los pacientes, así como su bienestar general.
Es importante señalar que la monitorización ambulatoria del electrocardiograma puede revelar una frecuencia y complejidad de PVCs mayor que la que se detecta en un electrocardiograma rutinario. Esto es especialmente relevante en la evaluación clínica, ya que los episodios de PVCs pueden ser más frecuentes durante actividades cotidianas o situaciones de estrés.
Un hallazgo clínico relevante es que un aumento en la frecuencia de los PVCs durante el ejercicio se asocia con un mayor riesgo de mortalidad cardiovascular. Esta relación implica que la presencia de un número elevado de PVCs en situaciones de esfuerzo debe ser investigada más a fondo, ya que podría indicar una mayor vulnerabilidad del corazón en pacientes con condiciones subyacentes. Por lo tanto, es crucial realizar una evaluación adecuada y continua para entender la naturaleza y las implicaciones clínicas de los latidos prematuros ventriculares en cada individuo.
Tratamiento
Cuando no se presenta enfermedad cardíaca asociada y los latidos ectópicos son asintomáticos, generalmente no se indica terapia alguna. En estos casos, los pacientes suelen experimentar palpitaciones leves que pueden ser una fuente de ansiedad. Sin embargo, en tales situaciones, proporcionar información y tranquilidad sobre la naturaleza benigna de esta arritmia puede ser suficiente para aliviar sus preocupaciones.
En los casos donde los latidos prematuros ventriculares son frecuentes, presentando patrones de bigeminia o trigeminia, o si se observan PVCs multifocales, es esencial descartar anomalías electrolíticas y enfermedades cardíacas ocultas. Las anomalías electrolíticas, como la hipopotasemia o la hiperpotasemia, así como la hipomagnesemia, pueden contribuir a la aparición de arritmias y deben ser evaluadas. Asimismo, es importante considerar la posibilidad de enfermedades cardíacas isquémicas o disfunción del ventrículo izquierdo, que podrían estar asociadas a la presencia de PVCs en estos pacientes.
En particular, cuando se ha documentado un volumen de PVCs que supera las diez mil por día mediante un monitoreo ambulatorio del electrocardiograma, se recomienda realizar un ecocardiograma. Este estudio permite evaluar la función cardíaca y detectar cualquier anomalía estructural que podría estar relacionada con el alto número de latidos prematuros.
El tratamiento farmacológico se reserva para aquellos pacientes que son sintomáticos o que desarrollan una miocardiopatía que se presume está relacionada con una alta carga de PVCs, generalmente cuando estos representan más del diez por ciento de los latidos diarios. En estos casos, los betabloqueantes o los bloqueadores de canales de calcio no dihidropiridínicos se consideran opciones adecuadas como primera línea de tratamiento.
Por otro lado, aunque los agentes antiarrítmicos de clase I y III pueden ser efectivos para reducir la frecuencia de los PVCs, es importante tener en cuenta que su uso puede estar limitado por una mala tolerancia en algunos pacientes. Además, existe un riesgo significativo de efectos proarrítmicos, lo que puede complicar el manejo de estos pacientes.
En los individuos que presentan síntomas persistentes a pesar del tratamiento médico o que han desarrollado una cardiomiopatía atribuida a la carga de PVCs, la ablación por catéter se convierte en una terapia bien establecida. Este procedimiento se realiza para eliminar el foco ectópico responsable de los latidos prematuros, ofreciendo una alternativa terapéutica para aquellos pacientes que no responden adecuadamente a la farmacoterapia o que experimentan un deterioro de su función cardíaca como resultado de los PVCs.

Fuente y lecturas recomendadas:
- Goldman, L., & Schafer, A. I. (Eds.). (2020). Goldman-Cecil Medicine (26th ed.). Elsevier.
- Loscalzo, J., Fauci, A. S., Kasper, D. L., Hauser, S. L., Longo, D. L., & Jameson, J. L. (Eds.). (2022). Harrison. Principios de medicina interna (21.ª ed.). McGraw-Hill Education.
- Papadakis, M. A., McPhee, S. J., Rabow, M. W., & McQuaid, K. R. (Eds.). (2024). Diagnóstico clínico y tratamiento 2024. McGraw Hill.


Originally posted on 19 de octubre de 2024 @ 5:56 AM