Paso de fármacos por la barrera hematoencefálica
Las células endoteliales de los capilares del cerebro están altamente especializadas y forman uniones estrechas continuas entre sí. Estas uniones estrechas limitan la entrada de moléculas y sustancias desde la sangre al cerebro y viceversa, creando una barrera selectiva conocida como barrera hematoencefálica (BHE). La BHE es esencial para mantener un entorno cerebral estable y proteger el tejido cerebral de sustancias potencialmente dañinas o disruptivas.
El transporte de fármacos a través de la barrera hematoencefálica es un proceso complejo y depende principalmente del transporte transcelular, que implica la entrada de moléculas a través de las células endoteliales capilares del cerebro, en lugar del transporte paracelular, que implicaría el paso entre las células endoteliales. Esto se debe a que las uniones estrechas continuas de las células endoteliales limitan la difusión de moléculas a través de los espacios intercelulares.
Para que un fármaco atraviese la barrera hematoencefálica y llegue al cerebro, debe superar varias barreras selectivas. La liposolubilidad de un fármaco es un determinante importante de su capacidad para cruzar la BHE. Las especies no ionizadas y no unidas de un fármaco tienen una mayor solubilidad en lípidos y pueden atravesar más fácilmente las membranas celulares. Por lo tanto, cuanto más liposoluble sea un fármaco, mayor será la probabilidad de que pueda atravesar la BHE.
Otros factores que pueden influir en la penetración de un fármaco en el cerebro incluyen su tamaño molecular, carga eléctrica y presencia de transportadores específicos en las células endoteliales. Los fármacos con un tamaño molecular pequeño tienen más probabilidades de cruzar la barrera, ya que pueden difundir más fácilmente a través de las membranas celulares. La carga eléctrica del fármaco también puede afectar su capacidad para atravesar la barrera, ya que las moléculas ionizadas pueden tener una menor permeabilidad. Además, algunos fármacos pueden ser transportados de manera activa a través de transportadores específicos presentes en las células endoteliales capilares del cerebro.
Es importante destacar que la barrera hematoencefálica no es absolutamente impermeable y algunos fármacos pueden cruzarla en diferentes grados. Algunos fármacos están diseñados específicamente para tener propiedades que les permitan atravesar la barrera de manera más efectiva, mientras que otros pueden requerir estrategias especiales, como la modificación química o el uso de sistemas de administración específicos, para aumentar su capacidad de penetración cerebral. La inflamación meníngea y encefálica aumenta la permeabilidad local.
Síguenos en X: @el_homomedicus y @enarm_intensivo APRENDER CIRUGÍA