¿Qué causa la gripe?
El virus de la gripe, también conocido como influenza, es un tipo de virus perteneciente a la familia de los ortomixovirus. Este virus produce una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que afecta a humanos y otros animales. La transmisión del virus de la gripe ocurre principalmente a través de las vías respiratorias, mediante la inhalación de pequeñas gotículas que se expulsan al toser, estornudar o hablar. A diferencia de otros virus, la transmisión del virus de la gripe por fómites (objetos contaminados) o contacto directo es menos común y menos eficiente.
El virus de la gripe se clasifica en tres tipos: A, B y C. El tipo A es el más diverso y puede infectar a una amplia variedad de mamíferos, incluyendo humanos, ganado porcino, caballos y aves. Los tipos B y C tienen una capacidad de infectar principalmente a los seres humanos. Esta distinción es importante porque el virus de la gripe tipo A tiene una mayor capacidad de generar pandemias y cambios antigénicos significativos.
La clasificación del virus de la gripe tipo A se basa en las proteínas que se encuentran en su superficie, específicamente la hemaglutinina (H) y la neuraminidasa (N). Se conocen 18 subtipos diferentes de hemaglutinina y 11 subtipos de neuraminidasa. Estas proteínas son importantes para la entrada del virus en las células huésped, su replicación y su liberación de las células infectadas. Los diferentes subtipos de H y N permiten la variabilidad genética del virus y su capacidad de evadir el sistema inmunitario del huésped.
La capacidad de mutación y recombinación genética del virus de la gripe tipo A es una de las razones por las cuales puede causar pandemias. Estos cambios genéticos, conocidos como drift antigénico e shift antigénico, pueden dar lugar a nuevas variantes del virus que el sistema inmunitario humano no reconoce y a las que no está inmunizado. Esto puede conducir a brotes severos de gripe con una alta morbilidad y mortalidad.
La vacunación anual contra la gripe es una estrategia importante para prevenir la propagación de la enfermedad. Cada año, se desarrollan vacunas específicas que contienen las cepas más probables de virus de la gripe que circularán durante la temporada. Sin embargo, debido a la capacidad de cambio del virus de la gripe tipo A, la efectividad de la vacuna puede variar de un año a otro.
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