¿Qué es el hipo?

¿Qué es el hipo?
¿Qué es el hipo?

El hipo, también conocido como singulto, es un reflejo involuntario que se produce en el cuerpo humano y en algunos animales, que se caracteriza por la contracción espasmódica e involuntaria del diafragma, seguida de un cierre repentino de la glotis. Esto produce un sonido característico, el cual se produce cuando el aire se fuerza a pasar por las cuerdas vocales cerradas. Aunque casi siempre es una molestia benigna y de resolución espontánea, el hipo puede ser persistente y signo de alguna enfermedad subyacente grave.

 

Fisiopatología

El hipo es un reflejo complejo que involucra varios músculos y nervios, así como la coordinación de varias áreas del sistema nervioso central. El principal músculo involucrado es el diafragma, que es el músculo respiratorio principal responsable de la inhalación y exhalación de aire. También están involucrados los músculos intercostales, que ayudan a mover las costillas y expandir el pecho durante la inhalación.

Es desencadenado por una estimulación del nervio frénico, que es el nervio que controla el diafragma, y del nervio vago, que está involucrado en la función gastrointestinal y respiratoria. La estimulación del nervio frénico y vago envía señales al centro del hipo en el bulbo raquídeo del cerebro, que a su vez envía señales a los músculos respiratorios para que se contraigan.

En la mayoría de los casos, es una respuesta normal y temporal a la irritación del diafragma o de los nervios frénico y vago. Sin embargo, en algunos casos, puede ser un síntoma de una afección médica subyacente.

 

Factores desencadenantes del hipo

Hay más de 100 causas de hipo recurrente o persistente por trastornos gastrointestinales, del sistema nervioso central, cardiovasculares y torácicos. El hipo puede ser desencadenado por una serie de factores como:

  • Ingestión excesiva de alimentos o bebidas: Comer en exceso o beber demasiado rápido puede irritar el diafragma y los nervios que lo controlan, lo que puede provocar hipo.
  • Consumo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol puede irritar el esófago y el estómago, lo que a su vez puede desencadenar hipo.
  • Cambios bruscos de temperatura: Los cambios bruscos de temperatura, como entrar en un ambiente muy frío o muy caliente, pueden desencadenar hipo en algunas personas.
  • Ansiedad y estrés: La ansiedad y el estrés pueden desencadenar  hipo, ya que pueden provocar cambios en la respiración y en el ritmo cardíaco que pueden irritar el diafragma.
  • Tragar aire: Tragar aire mientras se come o se bebe, especialmente cuando se come o bebe demasiado rápido, puede irritar el diafragma y desencadenar  hipo.
  • Enfermedades gastrointestinales: Las enfermedades gastrointestinales, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) o la inflamación del esófago, pueden irritar los nervios que controlan el diafragma y desencadenar hipo.
  • Enfermedades pulmonares: Las enfermedades pulmonares, como la neumonía o el asma, pueden irritar los nervios que controlan el diafragma y desencadenar el hipo.
  • Enfermedades metabólicas: Las enfermedades metabólicas, como la diabetes o el hipertiroidismo, pueden alterar la función nerviosa y desencadenar hipo.
  • Lesiones cerebrales: Las lesiones cerebrales, como un traumatismo craneal o un tumor cerebral, pueden alterar la función nerviosa y desencadenar hipo.

El hipo puede ser temporal o crónico. El hipo temporal es normal y generalmente se resuelve en pocos minutos o horas. En cambio, el hipo crónico es aquel que se prolonga durante más de 48 horas, lo cual puede ser una señal de alguna afección subyacente.

El hipo crónico puede ser causado por una serie de factores, como enfermedades gastrointestinales, infecciones, trastornos neurológicos, enfermedades pulmonares, enfermedades metabólicas, trastornos psiquiátricos, entre otros. Además, el hipo crónico también puede ser causado por ciertos medicamentos o por tratamientos médicos como la quimioterapia.

El hipo puede presentarse por comer en exceso

El hipo puede presentarse por comer en exceso

Tratamiento

El tratamiento del hipo depende de su duración y gravedad. En casos de hipo temporal, se pueden utilizar técnicas como la ingestión de agua, la estimulación del nervio vago o la respiración controlada para tratar de detener el hipo. En cambio, en casos de hipo crónico, se deben tratar las causas subyacentes, como una enfermedad pulmonar o gastrointestinal, para controlar el hipo.

Se pueden probar diferentes opciones de tratamiento para aliviar el hipo, incluyendo:

  • Estimulación del nervio vago: Este método consiste en la estimulación del nervio vago, que controla la actividad del diafragma, mediante la aplicación de una corriente eléctrica. La estimulación del nervio vago puede ayudar a restablecer el ritmo normal de la respiración y aliviar el hipo.
  • Técnicas de respiración: Las técnicas de respiración pueden ayudar a controlar el hipo, como respirar profundamente y lentamente, o contener la respiración durante unos segundos y luego exhalar lentamente.
  • Estimulación del paladar: La estimulación del paladar con un bastoncillo empapado en vinagre puede ayudar a aliviar el hipo. La estimulación del paladar puede provocar una contracción del diafragma y aliviar el hipo.
  • Medicamentos: Existen varios medicamentos que se pueden utilizar para tratar hipo persistente, como los tranquilizantes, los antidepresivos y los bloqueadores de los receptores de dopamina. Estos medicamentos pueden ayudar a relajar los músculos del diafragma y reducir la irritación del nervio vago.
  • Intervenciones quirúrgicas: En casos extremadamente raros, se puede considerar la cirugía para tratar el hipo persistente. La cirugía puede implicar la sección de los nervios que controlan el diafragma o la aplicación de una corriente eléctrica directamente en el diafragma para interrumpir la actividad involuntaria.

En general, no suele ser una afección grave, aunque puede ser molesto y durar varios días. Si es persistente y se acompaña de otros síntomas, es importante consultar a un médico para descartar cualquier problema de salud subyacente.

 

 

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Anatomía del hígado

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