Factores humorales y neuronales que estimulan la lactancia
La lactancia es un proceso fundamental para el desarrollo y el bienestar de los bebés. Los mecanismos humorales en la lactancia se refieren a los componentes líquidos y solubles en agua que se encuentran en la leche materna y que desempeñan un papel importante en la nutrición y protección del lactante.
Las glándulas mamarias producen la leche materna. La leche se desplaza desde las glándulas mamarias a través de tubos llamados conductos galactóforos. Cuando el bebé amamanta, la leche se mueve del seno hacia afuera a través de pequeños orificios en el pezón.
Factores humorales y neuronales que estimulan la lactancia
Los mecanismos humorales y neurales precisos involucrados en la lactancia son complejos. La progesterona, el estrógeno y el lactógeno placentario, así como la prolactina, el cortisol y la insulina, parecen actuar en coordinación para estimular el crecimiento y desarrollo del aparato secretor de leche en la mujer.
Con el parto, los niveles séricos maternos de progesterona y estrógeno disminuyen abrupta y profundamente, lo que elimina la influencia inhibitoria de la progesterona en la producción de alfa-lactoalbúmina y estimula la lactosa sintasa para aumentar la lactosa láctea.
La retirada de progesterona después del parto permite que la prolactina actúe sin oposición en su estimulación de la producción de alfa-lactoalbúmina.
La serotonina se produce en las células epiteliales mamarias y tiene un papel en el mantenimiento de la producción de leche.
Factores humorales y neuronales que estimulan la lactancia
La intensidad y la duración de la lactancia están controladas, en gran parte, por el estímulo repetitivo de la lactancia y el vaciado de la leche materna.
La prolactina es esencial para la lactancia y aunque los niveles de prolactina en plasma disminuyen después del parto a niveles más bajos que los hallados durante el embarazo, cada acto de succión provoca un aumento en los niveles.
La oxitocina, secretada en la hipófisis de manera pulsátil, estimula la expresión de la leche de un seno lactante al provocar la contracción de las células mioepiteliales en los alvéolos y en los pequeños conductos lácteos.
Eyección de leche
La eyección de leche, también conocida como el descenso de la leche, es un proceso fisiológico crucial en la lactancia materna. Este reflejo se inicia principalmente por la succión del bebé durante la lactancia. Aquí hay una explicación detallada de los elementos involucrados:
- Estimulación de la succión: Cuando el bebé succiona el pecho de la madre, se activan los receptores nerviosos en el pezón y la areola. Estos receptores envían señales al sistema nervioso central, específicamente a la hipotálamo.
- Señal al hipotálamo: El hipotálamo, una región del cerebro, interpreta las señales de succión y responde liberando una hormona llamada oxitocina.
- Oxitocina: La oxitocina es una hormona producida por la glándula pituitaria posterior, y su liberación en el torrente sanguíneo es estimulada por el hipotálamo en respuesta a la succión del bebé. Esta hormona tiene varios efectos en el cuerpo, pero en el contexto de la lactancia, su función principal es provocar la contracción de las células mioepiteliales que rodean los alvéolos mamarios, donde se produce y almacena la leche.
- Contracción de los alvéolos mamarios: La contracción de los alvéolos mamarios es esencial para el movimiento de la leche a través de los conductos lácteos hacia los conductos galactóforos y finalmente hacia el pezón. Esto facilita la expulsión de la leche y su llegada al bebé para su alimentación.
Es interesante notar que el reflejo de eyección de leche no solo está vinculado a la succión del bebé, sino que también puede ser desencadenado por otros estímulos, como el llanto infantil. Esto se debe a la conexión entre el sistema nervioso del bebé y la respuesta hormonal de la madre.
Además, el miedo o el estrés materno pueden inhibir el reflejo de eyección de leche. El estrés activa la liberación de hormonas como la adrenalina, que pueden contrarrestar los efectos de la oxitocina y dificultar la contracción de los alvéolos mamarios. Por lo tanto, un entorno tranquilo y relajado durante la lactancia puede favorecer la eyección de leche y facilitar una experiencia más cómoda y efectiva para la madre y el bebé.
Anatomía del hígado
Síguenos en X: @el_homomedicus y @enarm_intensivo
APRENDER CIRUGÍA
