Prurito perianal

El prurito perianal es una condición que se manifiesta a través de picazón y malestar en la región alrededor del ano. Esta sintomatología puede resultar de diversas causas, siendo una de las más comunes la higiene anal deficiente. Situaciones clínicas como fístulas, fisuras anales, hemorroides prolapsadas, tags cutáneos y episodios menores de incontinencia fecal pueden contribuir a la irritación y, por ende, al prurito.
Sin embargo, es importante señalar que una limpieza excesiva, particularmente el uso de jabones y productos irritantes, puede desencadenar irritación local o dermatitis de contacto. Esto destaca la necesidad de un equilibrio en la higiene, ya que tanto la falta como el exceso de cuidado pueden resultar en malestar.
Entre las causas que deben considerarse en el diagnóstico diferencial del prurito perianal se encuentran la dermatitis de contacto, la dermatitis atópica, infecciones bacterianas por estafilococos o estreptococos, infecciones parasitarias como oxiuros y sarna, así como infecciones por hongos, siendo particularmente relevante en individuos con diabetes. Adicionalmente, se deben evaluar infecciones de transmisión sexual, como condilomas acuminados, herpes, sífilis y molusco contagioso, junto con otras afecciones cutáneas como psoriasis, enfermedad de Paget y esclerosis líquen.
En los casos de prurito perianal idiopático, el examen físico puede revelar signos de eritema, excoriaciones o piel liquenificada y eczematosa. Esta presentación clínica subraya la importancia de una evaluación adecuada para descartar causas subyacentes.
La educación del paciente es fundamental para el manejo exitoso de esta condición. Se aconseja la eliminación de alimentos irritantes como los alimentos picantes, el café, el chocolate y los tomates, que pueden agravar los síntomas. Tras la defecación, se recomienda limpiar la zona perianal con toallitas sin fragancia, prehumedecidas con lanolina, y secar suavemente la piel. Además, se puede sugerir la colocación de un pequeño algodón junto al ano para absorber la transpiración o cualquier filtración fecal.
Es importante mencionar que ciertos ungüentos y lociones anales pueden empeorar el estado del paciente y, por lo tanto, deben evitarse. Aunque no se ha demostrado la eficacia de los corticosteroides tópicos de alta potencia, se puede considerar un tratamiento a corto plazo en algunos casos. Un estudio doble ciego cruzado indicó que una crema de capsaicina diluida al 0.006% proporcionó alivio sintomático en un 75% de los pacientes, lo que sugiere una posible opción terapéutica.
Fuente y lecturas recomendadas:
- Cohee MW et al. Benign anorectal conditions: evaluation and management. Am Fam Physician. 2020;101:24. [PMID: 31894930]
