Los defectos de la conducción AV pueden ser causa de compromiso hemodinámico.
Bloqueo cardíaco de primer grado
Intervalo PR > 0,2 s (un cuadrado grande en el registro ECG convencional). No necesita tratamiento, pero indica una cardiopatía de base, una alteración electrolítica o toxicidad por fármacos, por ejemplo, digoxina.
Bloqueo cardíaco de segundo grado
Puede ser de dos tipos:
● Mobitz de tipo 1 (fenómeno de Wenckebach). Se produce un aumento progresivo de la duración del intervalo PR seguido de una onda P, que no se conduce al ventrículo, y luego se repite el ciclo. En general es autolimitado.
● Mobitz de tipo 2. El intervalo PR es constante, pero algunas ondas P no se conducen al ventrículo. Cuando hay niveles más altos de bloqueo, por ejemplo, bloqueo 2:1 o 3:1, existe un riesgo significativo de progresión a bloqueo cardíaco completo.
Bloqueo cardíaco completo
No se conduce actividad eléctrica hacia el ventrículo. Esto puede provocar una parada ventricular (¡ausencia de GC!) o puede asociarse a un ritmo de escape idioventricular. En este caso no se observa ninguna relación clara entre las ondas P visibles y los complejos QRS en el ECG.
Tratamiento
Estimulación exógena permanente (con marcapaso): bradiarritmias sintomáticas, bloqueo asintomático AV Mobitz II o bloqueo cardiaco completo.
La estrategia más fisiológica para la estimulación de pacientes que subsisten con su ritmo sinusal, es un marcapaso programable múltiple bicavitario. Es particularmente importante la sincronía AV en pacientes en quienes la contracción auricular genera un incremento sustancial en el volumen sistólico y en aquellos en quienes es útil captar la frecuencia auricular para así generar la estimulación exógena ventricular reactiva a la frecuencia.
En personas con bloqueo completo y disfunción sistólica de ventrículo izquierdo pudiera estar indicada la colocación de un marcapaso capaz de estimular de forma simultánea los ventrículos izquierdo y derecho.