¿Qué es una colonoscopía?

por Homo medicus · 20 de marzo de 2024

Una colonoscopía es un procedimiento médico que se utiliza para examinar el colon (intestino grueso) y el recto utilizando un endoscopio, que es un tubo largo y delgado con una cámara y una luz en el extremo. El objetivo principal de una colonoscopía es detectar y diagnosticar anomalías en el colon, como pólipos, cáncer, inflamación y sangrado. El procedimiento también se puede utilizar para tomar biopsias o para extirpar pólipos.

Indicaciones

Las indicaciones para realizar una colonoscopía pueden incluir:

Detección del cáncer de colon: La colonoscopía se utiliza para detectar el cáncer de colon en personas de edad avanzada o en aquellas que tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de colon debido a antecedentes familiares o personales de pólipos o cáncer de colon.
Control del cáncer de colon: Las personas con antecedentes familiares de cáncer de colon tienen un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad. En estos casos, el médico puede recomendar una colonoscopía de manera regular para controlar cualquier signo de cáncer o pólipos precancerosos.
Síntomas gastrointestinales: La colonoscopía puede ser recomendada si una persona experimenta síntomas gastrointestinales, como dolor abdominal, diarrea crónica, estreñimiento, sangrado rectal, pérdida de peso inexplicable, anemia o cambios en los hábitos intestinales.
Detección y tratamiento de pólipos: La colonoscopía también se utiliza para detectar y extirpar los pólipos, que son crecimientos anormales en el colon que pueden ser precursores del cáncer de colon.
Evaluación del sangrado intestinal: La colonoscopía puede ayudar a identificar la fuente del sangrado intestinal, que puede ser causado por una variedad de condiciones, como úlceras, inflamación intestinal, diverticulitis o cáncer.
Evaluación de enfermedades inflamatorias intestinales: La colonoscopía también puede ser utilizada para evaluar la enfermedad inflamatoria intestinal, como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa.

Procedimiento

Antes de la colonoscopía, el paciente debe seguir ciertas instrucciones de preparación, que incluyen la limpieza intestinal para asegurar que el colon esté completamente vacío y limpio. Esto se hace típicamente con una dieta líquida durante uno o dos días antes del procedimiento y el uso de laxantes y/o enemas.

Durante el procedimiento, el paciente generalmente se coloca en posición de decúbito lateral y se administra un sedante para ayudar a relajarse. Luego, el endoscopio se inserta en el recto y se avanza lentamente a través del colon. El médico examina cuidadosamente las paredes del colon a medida que el endoscopio avanza y puede tomar muestras de tejido (biopsias) o extirpar pólipos según sea necesario.

La colonoscopía suele durar entre 30 minutos y una hora, aunque puede ser más larga si se toman biopsias o se extirpan pólipos. Después del procedimiento, el paciente se puede sentir adormecido debido a la sedación y se le supervisará en una sala de recuperación hasta que esté lo suficientemente despierto y estable para irse a casa. Algunas personas pueden experimentar gases, hinchazón o cólicos abdominales después de la colonoscopía, pero estos síntomas suelen ser temporales.

Complicaciones

Aunque la colonoscopía es generalmente segura, como cualquier procedimiento médico, puede haber complicaciones. Algunas de las posibles complicaciones de la colonoscopía incluyen:

Sangrado: El sangrado leve después de una colonoscopía es común, pero en raras ocasiones puede ocurrir sangrado grave. Esto suele ocurrir si se ha extraído un pólipo o si se ha perforado el colon.
Perforación: Una perforación es una lesión en la pared del colon que puede ocurrir durante la colonoscopía. Esto puede requerir una cirugía para reparar.
Reacciones adversas a la sedación: A veces, las personas pueden tener una reacción adversa a la sedación utilizada para la colonoscopía. Esto puede incluir una disminución de la respiración o la presión arterial, o una reacción alérgica a la medicación.
Infección: En raras ocasiones, una colonoscopía puede provocar una infección en el colon.
Dolor abdominal: Después de una colonoscopía, algunas personas pueden experimentar dolor abdominal, hinchazón o cólicos.