¿Cuáles son los tipos de parásitos internos del humano?
La palabra “parásitos” tiene sus raíces en el griego, donde “para” denota “junto a” y “sitos” significa “alimento”. Por ende, su significado literal es alguien que come junto a otro o vive a expensas de otro. Aunque este término podría aplicarse ampliamente, se reserva principalmente para describir helmintos y protozoarios en el ámbito de la parasitología humana.
Helmintos, como los gusanos, y protozoarios son organismos más grandes y complejos en comparación con bacterias y virus. Los helmintos son multicelulares y macroscópicos, mientras que los protozoarios, aunque unicelulares, son más grandes y estructuralmente más complejos que las bacterias.
Una característica distintiva es que tanto helmintos como protozoarios poseen una estructura celular eucariota, similar a las células de los hospedadores humanos. Esto implica que sus células contienen núcleos definidos y estructuras internas membranosas, en contraste con las células procariotas más simples de las bacterias.
A pesar de que bacterias y virus también pueden ser agentes patógenos, la convención lingüística distingue a los helmintos y protozoarios como parásitos debido a su compleja estructura biológica y sus interacciones más detalladas con los organismos huéspedes. En resumen, la elección de utilizar el término “parásito” para referirse específicamente a helmintos y protozoarios resalta su relación más compleja y estructuralmente similar con los hospedadores humanos.
Tipos de parásitos internos del humano
Los parásitos internos del ser humano se dividen en dos tipos:
- helmintos (gusanos).
- protozoarios.
Los helmintos son organismos multicelulares que pueden verse a simple vista. Hay dos phyla: platelmintos (gusanos planos) y nematelmintos (gusanos redondos). Ambos incluyen algunos géneros que maduran en el tubo digestivo y otros que migran por el tejido después de su ingestión o penetración por la piel.
¿Cuáles son los tipos de parásitos internos del humano?
Los huevecillos de los helmintos se convierten en larvas y las etapas larvarias se transforman en adultos. Los humanos sirven como hospedadores definitivos cuando ingieren larvas de helmintos, que se desarrollan en adultos en el intestino y casi siem pre causan una enfermedad leve, a menudo sin síntomas.
Cuando los humanos ingieren huevecillos de helmintos y sirven como hospedadores intermediarios, los huevecillos se convierten en larvas, que penetran el intestino, migran por el tejido e invaden órganos donde maduran hasta convertirse en adultos. Los hospedadores intermediarios con invasión parasitaria de órganos pueden sufrir una enfermedad grave.
Los protozoarios son organismos unicelulares microscópicos. Entre las muchas diferencias entre los helmintos y los protozoarios, la más importante es la capacidad de estos últimos (como las bacterias) para multiplicarse dentro del cuerpo humano y causar infecciones abrumadoras. Un mecanismo importante que favorece el crecimiento ilimitado es la evasión de la respuesta inmunitaria del hospedador, y sea por variación antigénica o por la supervivencia dentro de las células del hospedador.
Casi todos los helmintos requieren etapas en otros hospedadores para completar su ciclo vital y multiplicarse.
Anatomía del hígado
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